Bajo la luna
tu pelo enmarañado
la guitarra de sombrero
la sonrisa de Botero.
El mar es ciego
usa tu belleza de señuelo.
llueven medusas armónicas
y petulantes
testigos de mi amor exultante.
Borras la sonrisa
los martes de carnaval
las tardes bajan deprisa
la brisa
los prismas alucinan
al verte despierta
tu aroma hipnotiza
al pastor y sus caminos.
Hay hermosos testigos
de la rima dulce y con recuerdos
ninguna tiene la cadencia de tu alma
cuando duerme despierta.